Desde hace rato me he percatado de lo importante que es decir que tenemos un empleo. Y lo más extraño de todo, es que me refiero a precisamente DECIRLO, lo ejerzas o no. Socialmente, es importante para el ser humano jugar un roll dentro de una comunidad. Siempre nos han dicho que una persona que triunfa tiene que seguir un “caminito” estructurado, que se empieza por un buen trabajo.

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Ese buen trabajo, que se supone que nos dará ingresos para seguir haciendo todas esas cosas que “tenemos” que hacer, tarde o temprano se vuelve la identidad que tenemos. Ahora es sumamente importante decir qué eres o qué haces dentro de una organización, para que seas tomado en cuenta como un profesionista que está haciendo las cosas bien. Por eso yo te pregunto ¿Tu empleo es tu identidad?

Típico que estás en una conversación y estás escuchando a lo que se dedican otras personas. Ya por el simple hecho de escuchar la palabra “gerente” o “director”, hasta te sientes menos. Ya con eso tienes la idea de que es una persona exitosa, que le va bien, que tiene ingresos considerables, etc. Tú no te vas a poner a investigar si la persona es “gerente” de algo que de verdad valga la pena, o solamente usa el título para apantallar.

Lo curioso es que también las empresas caen en esto: Le ponen nombres rimbombantes a los puestos para que las personas “se sientan bien” por el simple hecho de tenerlos. Y es que la cuestión de dignificar un puesto de trabajo no tiene nada que ver con el título que le pones, sino con las ocupaciones y tareas que tendrás.

Cuando escuchas que alguien no tiene empleo, hasta se te hace una persona irresponsable o poco interesante. O si escuchas que tiene un trabajo ordinario, consideras que no tiene aspiraciones. La verdad es que, ni sabes exactamente a qué aspira esa persona, ni cuánto gana (Mira que hay muchos meseros que ganan un sueldo soñado).

También es complicado cuando deseas emprender, pues no puedes definirte como algo que apenas estás en proceso de ser. Como me dijo una vez una amiga, debes decretarlo.

Me gustaría que te quedaras con la idea de que eres mucho más que un título de empleo o un puesto laboral. Qué padre que seas gerente, pero no solamente eres eso. Y también quiero que te quede claro que el valor a una etiqueta profesional se la das tú, nadie más.

Independientemente de tu empleo, eres tú, eres una persona, eres alguien.

Originally posted 2016-06-28 19:07:05.

Published by Ileana Caschi

Comunicóloga. 30 años. Slytherin. Comparto contenido sobre comunicación y finanzas personales. Si deseas contactarme puedes hacerlo por aquí mismo. Un gusto tenerte por mi blog ¡Gracias por leer!