Para empezar, quiero aclarar que una figura no es mejor que la otra. Es decir, el hecho de que existan los jefes y/o los líderes, no hace mejor o peor a las personas que los representan. Está claro que todo depende de la naturaleza del trabajo realizado, y de los objetivos que se quieren alcanzar. Pero bueno, todos hemos conocido personas que pueden encajar en cualquier de las dos definiciones, por lo que es importante destacar que nunca sabremos quiénes serán las próximas personas con las que nos toque trabajar, o mejor aún, cuándo seremos nosotros jefes y/o líderes.

Estas figuras, casi siempre, representan la cabeza de un equipo. Puede ser desde un grupo de amigos, hasta la fuerza de trabajo de una organización. Está claro que estas personalidades siempre las encontraremos al momento de interactuar varias personas entre sí, puesto que la misma naturaleza del ser humano tiende a seguir un comportamiento deliberado por una “punta” de equipo.

Pero, ya entrando en el tema de este artículo, es importante aprender a diferenciar entre estos dos conceptos; y saber cuál funciona más en determinadas situaciones. También te sirve si tú consideras que juegas en estas posiciones, pues podrás determinar exactamente en dónde estás (y a dónde quieres llegar):

  • Primero que nada, un jefe es impuesto por una estructura o un conjunto de estructuras que constituyen a una organización. Cuando entras a un nuevo empleo, tienes a una persona que guía tu trabajo, te da indicaciones y retroalimentaciones. Esa persona, y muchos más que estén dentro del mismo universo, tienen objetivos en común; por eso es importante que alguien con experiencia y conocimientos conduzca una tarea determinada.
    Por otro lado, un líder no necesariamente fue determinado por una cabeza superior, o por una estructura previa. Una de las características de los líderes es que poco a poco van demostrando su capacidad de encaminar un evento determinado. Los continuos objetivos cumplidos le van aportando valor a su presencia y decisiones tomadas, por eso es que hay algunos líderes tardan en aparecer o son muy momentáneos.
  • A veces los jefes, al ser personalidades desconocidas, no suelen ser modelos a seguir. No estoy hablando en relación a su calidad moral, sino que muchas veces solamente se interactúa con ellos por la misma naturaleza del objetivo en común. Un líder genera un ideal de actitud y pensamiento, por lo que tiende a generar seguidores que intentan replicar su conducta o estilo de vida.
  • Un jefe puede imponer una sanción si el equipo no está funcionando de la manera adecuada. Tiene la autoridad para discernir si se están haciendo las cosas de la forma debida, y puede hacer las modificaciones necesarias según los objetivos. Un líder tal vez sea cabeza de equipo, pero lo más seguro es que no puede determinar el comportamiento de sus seguidores, y a que estos expongan que lo hacen por que tienen a un líder que seguir, éste no puede responder por ellos.
  • Un jefe puede, a su vez, tener uno o varios jefes. Esto significa que, además del equipo que tiene, él también forma parte de otro que cumple ciertos objetivos. Es como una cadena de trabajo, donde un jefe es un eslabón que une a diferentes equipos. En cambio, el líder puede ser autónomo y trabajar bajo convicción propia; no necesariamente tener una figura superior que dicte sus acciones.
  • A un jefe se le remunera de alguna u otra forma su capacidad y conocimiento, sobre todo, la forma en que guía a un equipo de trabajo. El líder puede hacerlo, simple y sencillamente, por convicción.
  • Un jefe sabe exactamente la posición que tiene, ni más ni menos, por lo que entiende cuáles son sus funciones y sabe cuál es su lugar dentro de la toma de decisiones. Un líder puede no tener muy en claro bajo que concepción lo tiene una comunidad, incluso no saberse a sí mismo como uno, pues muchas personas generan seguidores sin creer que lo son.
  • Un jefe lo será, siempre y cuando le sigan perteneciendo los mismos atributos impuestos por un universo determinado; dichos atributos pueden desaparecer y terminar así su figura de autoridad ante los demás. Un líder lo será siempre y cuando permanezca del lado de la ideología y/o mentalidad que le caracteriza. No depende de un externo que determine o no el lugar que ocupa dentro de un evento.
  • Un jefe es un medio de información, pues a través de él llegan los mensajes al equipo, y viceversa. Un líder es quien crea la información, y a su vez, es un medio de información para quiénes comparten su ideología.

¿Un líder y un jefe pueden coincidir en una misma persona? Sí.
¿Un líder es mejor que un jefe? No.
¿La figura del jefe está determinada nada más para las organizaciones o empresas? No, podemos tener jefes en nuestra familia, sin ser líderes. Al igual que podemos tener jefes en nuestro trabajo, que también sean líderes.
¿Un líder tiene que ser alguien famoso? No.

Para mi, estas son las diferencias más importantes, pero recuerda que todo depende de las circunstancias. Te invito a comentar o compartir, si es que piensas en otras diferencias, o crees que alguna no es del todo verdad. Por último, te pregunto ¿Qué te gustaría ser? ¿Por qué?

Originally posted 2015-09-14 01:23:01.

Published by Ileana Caschi

Comunicóloga. 30 años. Slytherin. Comparto contenido sobre comunicación y finanzas personales. Si deseas contactarme puedes hacerlo por aquí mismo. Un gusto tenerte por mi blog ¡Gracias por leer!