Es imposible que en este mundo no necesitemos de alguien más para hacer algo. Por más fregones que nos creamos, no somos todólogos ni tampoco venimos a este mundo a ver cuánto podemos lograr por nosotros mismos. Está dentro de la naturaleza humana interactuar con otras personas para el logro de objetivos en común. Además, somos seres sociales que nos relacionamos con otros individuos, empezando por la familia.

Convivimos de muchísimas maneras: con nuestra familia, compañeros de trabajo, amigos, equipos deportivos, relaciones amorosas, etc. Siempre se tratará de estar con más personas y de empatar en intereses. Pero como somos humanos, imperfectos, no todas las personas están en su mejor momento mental (refiriéndome a inteligencia emocional) para poder sobrellevar una tarea o el papel que les toca jugar.

Dentro de estas convivencia siempre habrá personas afines a nosotros, otras no tanto y otras… que de plano no tienen remedio. No quiero ser mala, tampoco despectiva ni criticona, pero existen personas que su misma inteligencia emocional les impide poder relacionarse de la forma correcta. Y no solamente me refiero a cómo tratan al prójimo, sino como expresan sus sentimientos, ideas o emociones. A este tipo de personas les llamo “tóxicas”.

Yo sé que en estos momentos estás pensando en alguien que entra en esa descripción. Por eso, por tu salud mental, tu buen desempeño en el trabajo y tu tranquilidad en las fiestas familiares; te comparto 7 claves para alejar a las personas tóxicas:

  1. Casi todas las personas tóxicas se la mantienen quejándose y quejándose. La mayoría de las veces por hacer algo que les toca hacer pero que no quieren, porque esforzarse no está dentro de sus ideales. Como tú sí eres una persona que entiende que sus obligaciones, no intentes explicárselas, mejor guíalas con el ejemplo.
  2. Lo peor de las personas tóxicas es que son contagiosas y tú también puedes ser una de ellas. Por lo mismo te invito a que controles tus pensamientos y emociones, sobre todo en un momento de estrés. Primero habla contigo mismo(a), respira y luego exprésate. Casi siempre hablar con alguien que no está involucrado puede ser de gran ayuda.
  3. Trata de entender su contexto ¿Por qué esa persona se comporta o se expresa de esa manera? Tal vez eso te ayudará a ser paciente.
  4. No le des más importancia a los comentarios negativos de los que lo merecen. No hagas más grande algo que no vale la pena.
  5. Si de plano está perjudicando tu estabilidad laboral, es momento de que hables con alguien que pueda intervenir.
  6. No es lo mismo quejarse que hacer críticas constructivas con soluciones a los problemas. Es muy sencillo decir qué está mal sin ofrecer una forma de resolverlo. Si no quieres ser una persona tóxica, piensa en cómo acabar con el problema, no solo hacerlo ver grande.
  7. Como dice uno de los “4 acuerdos”: Sé impecable con tus palabras. En el momento en que te unes a lo que una persona tóxica quiere, te vuelves como ella. Cuida lo que dices, cuida lo que opinas y cuida lo que haces. Cuando una persona tóxica vea eso, se alejará de ti.

Dime qué otras claves crees convenientes para alejar a este tipo de personas que siempre van a existir pero que no tienen por qué formar parte de tu rutina diaria. Tu mentalidad y tu profesionalidad están primero, y estoy segura de que entiendes el valor que le da a tu familia o a tu trabajo no ser una de ellas.

¡Gracias por leer!

Originally posted 2019-07-29 01:16:01.

Published by Ileana Caschi

Comunicóloga. 30 años. Slytherin. Comparto contenido sobre comunicación y finanzas personales. Si deseas contactarme puedes hacerlo por aquí mismo. Un gusto tenerte por mi blog ¡Gracias por leer!