Todo está en la actitud: El ejemplo de “El Socio”

El socio

Antes de que otra cosa suceda, quiero aclarar que este artículo lo escribí yo por gusto y los elotes “Chuy El Socio” no intervinieron en él. Puede sonar que les estoy haciendo publicidad o algo así, pero la verdad es que simple y sencillamente me considero una cliente contenta con el servicio, y eso es lo que voy a hablar.

En todos los aspectos de nuestra vida, desde la familia hasta manejar en la calle, la actitud es la base de cómo pensamos y actuamos. Yo defino a la actitud como la capacidad de procesar la información obtenida de nuestro en torno, y cómo reaccionamos ante ella. Es algo así como la forma en la que enfrentamos y actuamos en nuestra realidad.

Sabemos perfectamente que de la actitud dependen muchas cosas, como la educación. Un entorno, un ambiente o cualquier espacio puede verse alterado dependiendo de la actitud de las personas que interactúan en él. La actitud nos sirve para comunicar muchas cosas, desde un enojo, hasta mucha alegría.

En las organizaciones la actitud es el ingrediente principal del clima organizacional. Tanto el jefe, como cualquier empleado, deben mantener una actitud basada en los objetivos de la empresa, que se comprometa con una sola meta. De la actitud emanan resultados como el trabajo en equipo o los clientes satisfechos, tanto, que muchas veces tu cliente puede estar agradecido más con el servicio, que con el producto en sí.

En Chihuahua tenemos el caso de un negocio de elotes (esquites) dirigido por una familia. Sinceramente no sé información al respecto de su lugar de procedencia (pues se nota de primer instancia que no son locales), pero no profundizaré al respecto. Lo que quiero resaltar al mencionarlos a ellos como ejemplo, es el excelente trato y servicio al cliente que tienen con cada uno de los que entramos y consumimos sus productos.

“Elotes Chuy El Socio”, o mejor conocido como “El Socio”, es uno de los negocios que más tiempo tienen en nuestra ciudad. Existen otros también muy buenos, pero la diferencia principal es cómo te tratan cuando pides un elote. Siempre recibe una sonrisa, un buen trato, “buenas tardes”, etc. En ningún momento me ha tocado que me traten mal o que preparen de manera errónea lo que pido.

El lugar siempre está aseado, los ingredientes listos para usarse, y alguien siempre preparado para atenderte. Estamos hablando de una pyme que se ha conservado durante mucho tiempo, y que sus mismo ingresos le han permitido evolucionar: Hoy en día somos testigos de una ampliación en su local, y de mejores espacios para los consumidores.

Cualquiera que vaya por un elote, o por alguna chuchería, sabe que será recibido con buena vibra por parte de personal. Que un cliente tenga la seguridad de que será tratado de forma correcta, incluso antes de llegar, es uno de los objetivos que deberían tener todas las organizaciones. Yo sé, como parte de una organización, que cada cliente es distinto. Nunca sabemos con que postura llegarán a solicitarnos nuestros servicios, pero depende de nosotros cómo canalizamos en base a nuestra actitud.

El  Socio es conocido por sus ricos productos, pero además, porque te levanta los ánimos cada vez que te saluda. Es clave cuando le demuestras al cliente que te importa cómo se sienta, que no eres uno más en su lista de ganancias y que no importa cuántos productos iguales vendas al día, el empeño que le pongas a cada uno se nota.

¿Conoces otros negocios que caractericen por su buena actitud en el servicio? ¿Cuáles son?

Te invito a comentar y compartir.

(Nota: La foto de El Socio la tomé una vez que su carrito visitó mi universidad, hace algunos ayeres).

Originally posted 2015-06-26 18:43:31.

Libérate del auto sabotaje

Estoy segura de que todos hemos pasado por una situación de auto sabotaje. Y no se vayan tan lejos, piensa alguna vez que te hayan ofrecido alguna oportunidad laboral o una experiencia que implique salir de tu zona de confort. Algo que te va a traer muchos beneficios pero que, a simple vista, te llevará más esfuerzo. Quieres el objetivo, quieres el resultado, pero ese pasito que tienes que dar te limita y te mete en tu cabeza miles de ideas para “evadir” tu nueva oportunidad. Eso es auto sabotaje.

“Es que no soy tan buena”, “es que no voy a poder con la carga, “es que creo que no estoy lista”, “es que todos son súper buenos”…. y el estelar “Yo iba a ser un buen corredor, pero me chingué la rodilla”.

Es muy común que estos pensamientos de saboteadores invadan nuestra cabeza, son producto de inseguridades que son normales, pero no por eso debemos dejar que impidan mejoras en nuestra vida. Considero que cualquier persona puede liberarse del auto sabotaje, siempre cuando esté convencido(a) de lo que realmente quiere.

A continuación, te comparto algunos tips para dejar de meterte el pie, avanzar en tu vida y demostrar que eres una persona con la suficientemente capacidad de mejorar:

  • No andes alardeando de algo que quieras mucho si no tienes la seguridad de que realmente lo deseas, porque cuando llegue y no quieras esforzarte por tenerlo, vas a quedar en ridículo con todas las personas.
  • Para todo hay tiempo, pero para todo hay excusas.
  • Los pretextos no queman calorías.
  • Si no empiezas mañana vas a estar peor que hoy.
  • Las cosas son de las personas que las hacen, no que dicen que las van a hacer.
  • Siempre vas a poder hacer algo que te motive, siempre. Así tengas que modificar tu agenda diaria.
  • Rodéate de personas que estén cambiando sus hábitos para ser mejores.
  • Ninguna cosa difícil se hizo yéndose por el camino fácil.
  • No te bases nunca en las malas experiencias de los demás.
  • ¿Qué prefieres, esforzarte o pasarte todo el tiempo dándole like a los triunfos de alguien más?
  • Después de dar el primer paso, el segundo será más sencillo.
  • Elabora un plan.
  • Empieza poco a poco. Si empiezas muy fuerte, te cansarás y te desanimarás.
  • Si estás buscando bajar de peso o moldear tus músculos, necesitas primero trabajar en tu mentalidad.
  • Tomar una decisión para darle gusto a los demás es la peor forma de decirte que a ti mismo que no eres prioridad.

No empieces hoy, empieza mañana. Empieza con un paso, empieza con una hoja del libro que tienes pendiente, empieza con una sentadilla, empieza ahorrando un peso, no importa cuánto tiempo te lleve, pero empieza ya.

Y por último, te quiero invitar al siguiente grupo de Facebook donde compartimos contenido específicamente para motivarte y evitar que te rajes, intégrate a Sin Chingarte la Rodilla

Eres tú contra el mundo, no contra tu mente.

Originally posted 2019-03-10 23:07:45.

¿Tengo que renunciar a mi trabajo para emprender?

Últimamente he visto que circula la siguiente imagen en redes sociales:

sueños

Esta imagen refiere a que las personas dejamos de cumplir nuestros sueños, por una vida con una quincena fija y estabilidad laboral. La verdad, me hizo reflexionar mucho y me cuestioné a mi misma si es verdad que tengo que renunciar a mi empleo, o bueno en general no debo de tener ningún empleo, para poder cumplir mis sueños.

Evidentemente, depende mucho de la naturaleza de todo eso que sueñas si te funciona tener un horario fijo en una oficina, o si de plano necesitas ser un alma libre con viviendo la incertidumbre de “qué pasará” durante todos los días. Existen una gran cantidad de sueños, y todos merecen ser cumplidos (Creo que nunca debemos juzgar a alguien por lo que sueña o quiere alcanzar). Pero para fines prácticos, hablaré de mi misma, ya ustedes sabrán si esta reflexión también les funciona en su vida.

Primero que nada, los humanos siempre soñamos con objetivos. Por ejemplo: Uno de mis sueños es conocer Japón, pero pues boleto de avión pagado no va aparecer por generación espontánea (si no sabes qué es generación espontánea, te recomiendo regresar a tus libros de biología de secundaria). Otro sueño que tengo, es ver a mi grupo favorito en vivo; volvemos a lo mismo, el ticket V.I.P no va a llegar un día a la puerta de mi casa. Las personas soñamos con tener o hacer cosas, con estar, ser o pertenecer a algo. Es normal. Es natural. Pero lo que no incluyen nuestros sueños, es el cómo.

Una vez escuché una frase que dijo Madonna (si no sabes quién es, entonces vuelve a nacer): “La fama no es una meta, es un resultado”. Todos hemos soñado alguna vez en nuestras vidas con ser famosos, independientemente de la profesión, deseamos el reconocimiento ajeno. Todos esos sueños que pasan por nuestra cabeza día a día, pueden ser cumplidos en la medida en que lo deseamos. Pero esta imagen que compartí al inicio nos dice “debes renunciar a tu trabajo estable para alcanzar tus sueños”. Yo diría: No, debes encontrar el equilibrio entre una estabilidad y una necesidad propia.

Pasamos al tema del emprendimiento, donde tenemos la idea de que una persona que emprende es más exitosa que una que no, independientemente de su sueldo o trabajo realizado. Y siempre nos han dicho que para emprender, tienes que dejar tu trabajo de oficina. No entiendo en qué momento dejan de ser incompatibles, sí tal vez por el tiempo, sí tal vez por las ganas de hacer las cosas; pero el hecho de que tu trabajo no te hace feliz, no es culpa de tu empleo, es culpa tuya.

Muchas personas se sienten agobiadas por la rutina, por tener un horario, por tener un jefe y un equipo de trabajo; se sienten tristes porque los resultados son para otras personas. Si eso no te hace feliz, entonces cámbialo, pero no consideres a tu trabajo como el culpable de tus desgracias. La mayoría de las personas que se queja día a día, es porque no saben lo que les apasiona de verdad, o porque se sienten atadas a un estilo de vida que no les gusta.

Aunque tengas un empleo “estable”, puedes emprender. Aunque tengas una rutina, puedes hacer cosas fuera de ella. Aunque tengas un horario, puedes trabajar en otras cosas fuera de él. Conozco personas que se pasan toda la vida pensando en el hubiera, esperando que la oportunidad idea de viajar les llegue de la nada. Yo sé que es necesario el dinero, yo sé que es necesaria la estabilidad, pero no por eso vas a dejar de buscar todo eso con lo que sueñas.

Yo tengo un trabajo de oficina, y poco a poco he encontrado la manera de poder hacer las cosas que me gustan, emprender con lo que quiero; pero a la vez, no descuidar mi actual labor. Te será irónico si te digo que, gracias a ese trabajo de 8 hrs diarias, tengo este blog. Que muchas cosas de las que he aprendido sobre comunicación, han sido de mi trabajo. Que he crecido como persona, gracias a mi empleo. Claro, y como parte de mi desarrollo profesional, mis objetivos no son estos y deseo crecer en el área de la comunicación, pero no por eso, no por tener ahorita un empleo que no va de acuerdo con mis sueños, significa que ya fracasé. Obviamente espero que, eventualmente, la parte que emprendí me de para vivir, pero estoy muy consiente de que no será de la noche a la mañana. Todo se trata de ser perseverantes y realistas.

Los invito a analizar cómo quieren conseguir las cosas con las que sueñan, y en eso se tienen que poner a trabajar. Qué fregón si deseas emprender, pero no puedes empezar a ciegas, necesitas tener bases sólidas para hacerlo, y tal vez esas bases las puedas construir de manera alterna mientras adquieres experiencia profesional. Una cosa no está peleada con la otra, no utilices a tu empleo de 8 hrs diarias como un pretexto para no hacer las cosas.

 

Originally posted 2015-06-19 19:33:35.